En algún momento de nuestras vidas, todos experimentaremos una pérdida. Puede ser el fin de una relación, el despido de un trabajo, la pérdida de una casa o la muerte de un ser querido. Es natural atravesar un proceso de duelo. Al buscar oportunidades en la adversidad o encontrar maneras de recordar lo bueno de las personas o cosas que hemos perdido, podemos ayudarnos a recuperarnos mental y emocionalmente.

Uno encuesta nacional encontró:

  • Casi 60% de personas han experimentado una pérdida importante en los últimos 3 años.
  • La recuperación lleva tiempo. Tras una pérdida, casi la mitad de las personas afirmaron que el intenso dolor tardó hasta seis meses en disminuir.
  • Más de 2/3 de las personas que pasaron por un evento que cambió su vida tuvieron síntomas físicos mientras estaban de duelo.

Consejos para salir adelante

Intente ver su experiencia como una fortaleza. Cuando ocurren cosas malas, puede ser doloroso, pero a medida que sigues viviendo sin la persona, cosa o situación que una vez tuviste, te vuelves más fuerte. Superar una pérdida y aprender a seguir adelante te ayuda a desarrollar las habilidades necesarias para afrontar situaciones difíciles en el futuro.

Aprenda de los demás. ¡No está solo! Puede que haya grupos de apoyo en su comunidad para ayudarlo a superar cualquier pérdida o tragedia por la que haya pasado. Si no está preparado para hablar de las cosas en persona o no puede encontrar el tipo de grupo de apoyo adecuado, el Internet está lleno de lugares donde la gente se reúne en línea para hablar de sus experiencias compartidas. Comparta su historia. Formule preguntas sobre cómo otras personas pasaron por momentos difíciles para recordar que, si ellos pueden hacerlo, usted también puede.

Busque oportunidades en medio de la adversidad. A veces, la pérdida nos abre nuevas posibilidades. Al principio, puede que te sientas culpable o egoísta por explorar estos pensamientos, pero no hay nada de malo en buscar maneras de mejorar o cambiar tu vida después de un suceso trágico. El fin de una relación romántica o la muerte de un ser querido puede darte la libertad de pasar más tiempo con tus amigos o dedicarte a intereses que has estado postergando. Si has perdido tu hogar en un desastre, podrías considerar mudarte al lugar donde siempre has soñado vivir.

Recuerde los buenos tiempos. Cuando se pierde algo que se ama, uno se centra casi automáticamente en el dolor que siente por la pérdida. Al recordar los buenos momentos que pasaron en un determinado lugar, con una mascota o con una persona, agradezca por haber tenido esas experiencias. Puede ser aún más útil si una persona que comparte su pérdida se une a usted en los recuerdos. Tal vez hasta puedan reír juntos.

Haga lo que lo hace feliz. Mimarse a sí mismo puede ayudarlo a recordar cómo sentirse bien después de enfrentarse a una situación negativa o trágica, y lo llevará de vuelta a un lugar donde podrá apreciar todas las cosas positivas que la vida tiene para ofrecer. Puede elegir hacer algo emocionante o relajante, la idea es hacer lo que le agrada.

Encuentre maneras de honrar su pérdida.Al conmemorar la pérdida de un ser querido, ayuda a mantener vivo su recuerdo. Puede iniciar una recaudación de fondos para una causa especial en su nombre, plantar un árbol en uno de sus lugares favoritos, colgar sus fotos en su hogar, crear una página web conmemorativa o una página de Facebook, hacer algunas de las actividades que disfrutaba, o incluso hacerse un tatuaje que le recuerde a esa persona.

No tenga miedo de buscar ayuda.. Es perfectamente normal tener dificultades para adaptarse a la vida después de que te haya sucedido algo malo, pero si ves que han pasado semanas o meses y parece que no puedes funcionar o simplemente no sabes qué hacer para sentirte mejor, es hora de buscar ayuda. Tu empleador podría tener un Programa de Asistencia al Empleado (PAE), puedes obtener una referencia para un profesional de la salud mental de tu médico de cabecera o, si no tienes seguro, puedes buscar servicios con asistencia para el pago en findtreatment.gov.