Si estos síntomas le resultan familiares, una evaluación de salud mental en línea puede ayudarle a comprender si sus síntomas le están afectando lo suficiente como para buscar ayuda médica u otro profesional. Realice una evaluación de ansiedad. aquí.
El trastorno de ansiedad generalizada (TAG) se caracteriza por seis meses o más de preocupación y tensión crónicas y exageradas, infundadas o mucho más graves que la ansiedad normal que experimenta la mayoría de las personas. Quienes padecen este trastorno suelen esperar lo peor. Se preocupan excesivamente por el dinero, la salud, la familia o el trabajo, incluso cuando no presentan síntomas de problemas. Son incapaces de relajarse y a menudo sufren de insomnio. Muchas personas con TAG también presentan síntomas físicos, como fatiga, temblores, tensión muscular, dolores de cabeza, irritabilidad o sofocos.
Afortunadamente, a través de investigaciones apoyadas por el Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH), se han desarrollado tratamientos efectivos para ayudar a las personas con TAG.
Causas
Algunas investigaciones sugieren que el TAG puede ser hereditario y que puede empeorar durante el estrés. El TAG suele comenzar a una edad más temprana y los síntomas pueden manifestarse más lentamente que en la mayoría de los demás trastornos de ansiedad.
Trastornos coexistentes
Las investigaciones demuestran que el TAG suele coexistir con depresión, abuso de sustancias u otros trastornos de ansiedad. Otras afecciones asociadas con el estrés, como el síndrome del intestino irritable, suelen acompañar al TAG. Los pacientes con síntomas físicos, como insomnio o dolores de cabeza, también deben informar a sus médicos sobre sus sentimientos de preocupación y tensión. Esto ayudará al profesional de la salud del paciente a reconocer que la persona padece TAG.
Tratos
Los tratamientos para el TAG incluyen medicamentos y terapia conductual o cognitivo-conductual.
- Medicamento: El tratamiento exitoso puede incluir medicamentos ansiolíticos, como la buspirona y las benzodiazepinas o antidepresivos.
- Terapia conductual: La terapia conductual se centra en el uso de técnicas específicas de relajación para modificar los comportamientos que les causan ansiedad. Por ejemplo, una técnica entrena a los pacientes en un ejercicio especial de respiración que consiste en respiraciones lentas y profundas para reducir la ansiedad. Esto es necesario porque las personas ansiosas suelen hiperventilar, respirando rápida y superficialmente, lo que puede provocar taquicardia, mareos y otros síntomas. Otra técnica, la terapia de exposición, expone gradualmente a los pacientes a lo que les asusta y les ayuda a afrontar sus miedos.
- Terapia cognitivo-conductual: Al igual que la terapia conductual, la terapia cognitivo-conductual enseña a los pacientes a reaccionar de forma diferente ante las situaciones y sensaciones corporales que desencadenan los síntomas de ansiedad. Sin embargo, los pacientes también aprenden a comprender cómo sus patrones de pensamiento contribuyen a sus síntomas y cómo modificarlos para que los síntomas sean menos probables. Esta comprensión de los patrones de pensamiento se combina con técnicas conductuales para ayudar a las personas a afrontar las situaciones que les causan miedo.
Otros recursos
Línea de ayuda para casos de suicidio y crisis 988
988
988lifeline.org
Psicología central
https://psychcentral.com/disorders/anxiety/generalized-anxiety-disorder-symptoms/
Guía de ayuda
http://www.helpguide.org/articles/anxiety/generalized-anxiety-disorder-gad.htm
Niños preocupados
http://www.worrywisekids.org/
Asociación Estadounidense de Ansiedad y Depresión
8730 Georgia Ave # 600
Primavera plateada
MD 20910
(240) 485-1001
www.adaa.org
