Durante los inicios de los tratamientos de salud mental, los manicomios solían sujetar a las personas con enfermedades mentales con cadenas y grilletes de hierro alrededor de los tobillos y las muñecas. Con una mejor comprensión y tratamientos, esta cruel práctica finalmente cesó. A principios de la década de 1950, Mental Health America hizo un llamado a los manicomios de todo el país para que entregaran sus cadenas y grilletes desechados. El 13 de abril de 1953, en la Fundición de Campanas McShane en Baltimore, Maryland, Mental Health America fundió estas ataduras inhumanas y las transformó en un símbolo de esperanza: la Campana de la Salud Mental, la "Campana de la Esperanza". En 1953, el gobernador de Maryland, Theodore McKeldin, y la Sra. A. Felix DuPont, fundieron el metal de las cadenas fundidas utilizadas para sujetar a personas con enfermedades mentales para crear la Campana de la Salud Mental.