Todos nos deprimimos de vez en cuando, pero la tristeza que dura dos o más semanas puede ser un signo de depresión clínica. Es una afección de salud real y grave que afecta a más de 20 millones de adultos estadounidenses cada año.[1]
Estos son signos y síntomas de depresión:
- Estado de ánimo persistentemente triste, ansioso o vacío
- Sentimientos de desesperanza o pesimismo
- Sentimientos de culpa, inutilidad o impotencia.
- Pérdida de placer o interés en actividades que antes eran placenteras, incluido el sexo.
- Poco o ningún apetito y pérdida de peso, o comer en exceso y aumento de peso.
- Inquietud y/o irritabilidad
- Dificultad para concentrarse, recordar cosas o tomar decisiones.
- Pérdida de energía, fatiga o estar “ralentizado”
- Insomnio, despertarse temprano por la mañana o dormir demasiado.
¿Se puede tratar la depresión?
La depresión es altamente tratable con tratamientos como terapia, medicamentos y cambios en el estilo de vida. Pero puede que no siempre sea... fácilmente tratada. Para muchas personas, la depresión puede continuar a pesar del tratamiento. Es posible que tengan depresión resistente al tratamiento o TRD. Esto sucede cuando los medicamentos alivian parcialmente los síntomas o no ayudan en absoluto.
¿Cómo se trata la TRD?
Si el tratamiento aún no te ha funcionado, ¡no te rindas! Mantén la esperanza de que te recuperarás. Considera estas opciones y habla con tu médico sobre qué tratamientos podrían ser adecuados para ti.
- Medicamento. Los medicamentos pueden aliviar los síntomas de la depresión. Sin embargo, el primer medicamento que tome podría no ser el adecuado para usted. Si persiste con síntomas después del tratamiento antidepresivo inicial, no debe abandonarlo. El medicamento puede tardar un tiempo en hacer efecto, o podría ser útil modificar la dosis. También podría necesitar probar varios medicamentos, tomar más de uno o añadir otras formas de tratamiento, como la psicoterapia. Tenga en cuenta que encontrar el/los medicamento(s) o la combinación de tratamientos adecuados para la DRT puede llevar tiempo.
- Psicoterapia. Un profesional de salud mental capacitado le ayudará a hablar sobre sus estados de ánimo y comportamientos. La terapia puede ofrecerle nuevas maneras de manejar el estrés y evitar eventos negativos que puedan desencadenar síntomas depresivos.
- Grupos de apoyo. Hablar con otras personas que también padecen depresión puede ayudarte a sentirte menos solo y más informado sobre tu enfermedad y sus tratamientos. Existen muchos grupos de apoyo locales para personas con depresión.
- Neuroestimulación. La neuroestimulación se está convirtiendo en una opción para las personas que han probado una variedad de antidepresivos, pero no funcionaron, solo funcionaron parcialmente o dejaron de funcionar.
Estimulación del nervio vago (ENV) Es un tipo de neuroestimulación aprobado como tratamiento adicional para la depresión crónica o recurrente en adultos que no han tenido éxito con cuatro o más antidepresivos. Se coloca un dispositivo en el pecho que envía una corriente eléctrica al cerebro.
Terapia electroconvulsiva (TEC) Es otro tipo de neuroestimulación. La TEC puede ser útil para personas con depresión grave o potencialmente mortal y para quienes no pueden tomar antidepresivos.[2] Se colocan electrodos en la cabeza para administrar impulsos eléctricos. La TEC ha generado controversia, pero ha mejorado en los últimos años. Puede ser útil cuando los antidepresivos no son lo suficientemente eficaces. Los investigadores también están estudiando otros tratamientos de neuroestimulación, como la estimulación magnética transcraneal (EMT), la terapia de estimulación magnética (TMS) y la estimulación cerebral profunda (ECP).
Farmacogenómica
La farmacogenómica es el estudio de cómo los genes de una persona influyen en su reacción a los fármacos. Es un campo relativamente nuevo que promete desarrollar medicamentos y dosis eficaces basados en la composición genética de cada persona.
Al colaborar con un médico para iniciar un tratamiento para una afección de salud mental, existen diversos factores que influyen en la decisión del medicamento más adecuado para usted, como su historial médico y mental, sus antecedentes familiares, el costo y los efectos secundarios. Las pruebas farmacogenómicas pueden ser una herramienta adicional para su médico que le ayude a elegir el medicamento con mayor precisión.
Su médico realiza la prueba farmacogenómica con un simple frotis bucal. Al analizar las variaciones genéticas de su ADN, la prueba puede proporcionar información sobre los genes que pueden influir en la forma en que usted descompone o reacciona a ciertos medicamentos. Esto puede ayudar a su médico a predecir qué medicamentos serán eficaces para usted.
El costo de las pruebas varía según la prueba solicitada y su seguro médico. No todas las aseguradoras lo cubren, aunque algunas podrían hacerlo según el motivo de la prueba, por ejemplo, si ha probado otros medicamentos que no han funcionado. Si le preocupa el costo y la cobertura, contacte a su aseguradora antes de la prueba para saber qué esperar.
Actualización de la investigación
Investigadores del Instituto Nacional de Salud Mental, parte de los Institutos Nacionales de Salud, están analizando la eficacia de diferentes tratamientos para personas que aún presentan síntomas de depresión después de haber probado un antidepresivo. El estudio consta de varias fases. Hasta el momento, han publicado los siguientes resultados:
- Una de cada tres personas no presentó síntomas con el primer medicamento que utilizó.[3]
- Una de cada tres personas dejó de tener síntomas con la ayuda de un medicamento adicional.[4]
- Una de cada cuatro personas quedó libre de síntomas después de cambiar a un medicamento diferente.[5]
- En el caso de las personas que intentaron cambiar a un segundo medicamento y aún tenían síntomas, una de cada cinco personas volvió a estar libre de síntomas cuando cambió de medicamento nuevamente.[6]
El estudio muestra que las personas que han probado antidepresivos, pero aún presentan síntomas de depresión, tienen diversas opciones de medicación. Para más información, visite http://www.nimh.nih.gov/healthinformation/stard.cfm.
La historia de Tracy
Durante muchas semanas, me sentí cansada, pero no podía dormir. No tenía ganas de comer y me sentía triste todo el tiempo. Dejé de ver a mis amigos y me sentía desesperanzada con mi vida. Sabía que algo andaba mal y hablé con mi médico, quien me recetó un antidepresivo y me sugirió terapia. Empecé a tomar medicamentos y asistí a terapia, pero después de cuatro meses, seguía sin sentirme mucho mejor. Aun así, seguí trabajando con mis médicos y, como equipo, encontramos un medicamento que me ayudó. Poco a poco, empecé a sentirme mejor. Fue un proceso largo, pero con ayuda, pude superarlo.
Recordar
- Si el tratamiento no funciona de inmediato, no te rindas.
- Es posible que necesite cambiar la cantidad de medicamento que toma, tomar más de un medicamento o cambiar de medicamento, o probar más de un tratamiento.
- Si está tomando algún medicamento, no lo deje por su cuenta. Consulte primero con su médico.
- Trabaje en estrecha colaboración con su médico para encontrar el mejor tratamiento para usted.
Otros recursos
Instituto Nacional de Salud Mental
Teléfono: (866) 615-6464
www.nimh.nih.gov
Alianza de apoyo para la depresión y el trastorno bipolar
Teléfono: (800) 826-3632
www.dbsalliance.org
Familias por la concientización sobre la depresión
Teléfono: (781) 890-0220
www.familyaware.org
Esta información se proporciona a través de una subvención educativa (sin restricciones) de Cyberonics, Inc.
[1] Kessler RC, Chiu WT, Demler O, Walters EE. Prevalencia, gravedad y comorbilidad de los trastornos del DSM-IV a doce meses en la Replicación de la Encuesta Nacional de Comorbilidad (NCS-R). Archivos de Psiquiatría General, junio de 2005; 62 (6): 617-27.
[2] Frank E, Karp JF, Rush AJ (1993). Eficacia de los tratamientos para la depresión mayor. Boletín de Psicofarmacología, 1993; 29:457-75.
[3] Instituto Nacional de Salud Mental
[4] Instituto Nacional de Salud Mental
[5] Instituto Nacional de Salud Mental
[6] Instituto Nacional de Salud Mental