Cuando las empresas piensan en la flexibilidad para sus empleados, suelen pensar en acuerdos laborales flexibles, como horarios diferentes o la posibilidad de teletrabajar. Pero la flexibilidad va más allá de dónde y cuándo pasan su tiempo los empleados. La flexibilidad también puede abordar cómo los empleados invierten su tiempo en alcanzar sus objetivos laborales.

Descubra cómo funciona la flexibilidad para su empresa.

Las investigaciones sobre el empoderamiento de los empleados como herramienta para el compromiso se remontan a la década de 1990, cuando se convirtió en un término de moda en empresas de todo Estados Unidos. El empoderamiento a través de la flexibilidad es más importante que nunca para los empleados y para quienes dirigen a otros. Identifique los factores de estrés de los empleados y explore cómo la flexibilidad frente a estos factores puede reducir el agotamiento y apoyar el empoderamiento de los empleados. Además, capacite a los gerentes sobre el valor de la flexibilidad y desarrolle métodos para evaluar cómo la fomentan.

Promover la autonomía de los empleados pero brindarles orientación.

El estilo de gestión es un factor clave que influye en la cultura laboral. Los diferentes estilos de gestión influyen en el grado de participación de los empleados en la toma de decisiones, en cómo se intercambia información entre la dirección y los empleados, y en cómo reciben apoyo de la dirección. Los estilos de gestión influyen en la percepción que los empleados tienen de sí mismos y de sus lugares de trabajo, y estas percepciones influyen en su comportamiento. Microgestionar a los empleados (dedicar una cantidad excesiva de tiempo a controlar detalles y procesos) hace que se sientan menos comprometidos. No gestionar a los empleados en absoluto puede hacer que se sientan desorientados y aislados. Los gerentes deben buscar un punto medio, estableciendo objetivos y ofreciendo recursos para ayudar a los empleados a alcanzarlos sin prescribir métodos exactos.

Permitir que los empleados participen en las decisiones.

Los empleados que participan en la toma de decisiones se involucran más, se motivan más y son más productivos. Además, fortalecen sus habilidades de comunicación y resolución de problemas. La participación de los empleados en la toma de decisiones también implica estar expuestos a información que les permitirá tomar decisiones y desempeñar su trabajo a diario. En general, los empleados experimentan un sentido de inclusión y autoeficacia cuando influyen en los resultados, las políticas y las prácticas de su lugar de trabajo (prácticas de alta participación). Los empleadores deberían considerar la implementación de un proceso de toma de decisiones compartida en el que los supervisores y sus subordinados directos definan y negocien claramente sus funciones, responsabilidades y necesidades de apoyo por escrito anualmente.

Utilice las revisiones 360 para evaluar a los gerentes.

Los empleados deben tener la oportunidad de brindar retroalimentación sobre sus gerentes y cómo los han apoyado durante el último año. Esto difiere de las herramientas tradicionales de evaluación del desempeño, donde los gerentes solo brindan retroalimentación a sus subordinados directos, y permite una mayor flexibilidad y compromiso de los empleados.