Es difícil encajar en un molde cuando no puedes identificarlo.
Crecer como mexicoamericano en San Diego me planteó una serie de dificultades interesantes. A menudo sentía que nunca era lo suficientemente estadounidense aquí, pero nunca lo suficientemente mexicano cuando fui allá. Me cohibía tener acento en ambos idiomas; no sabía con certeza si el inglés o el español era mi lengua materna. No podía pronunciar bien la erre en español y me costaba diferenciar los sonidos de la "sh" y la "ch" hasta bien entrada mi adolescencia, y tenía primos que me llamaban el "chico blanco" porque hablaba principalmente inglés. Incluso en los deportes, disfrutaba viendo la Premier League inglesa en lugar de la Liga Mexicana, pero era un ferviente hincha de la selección mexicana de fútbol.
Crecer a tres salidas de la frontera entre Estados Unidos y México fue como estar al borde de la orilla mientras una ola se retiraba hacia el océano. Sientes como si tus piernas te llevaran de vuelta al infinito. Así me siento como mexicoamericana. Tengo los pies bien plantados en esta tierra, pero mi corazón late al ritmo de La Bamba.
Hoy escribo como orgullosa cofundadora mexicano-americana de Soluna Wellness. Somos un centro ambulatorio de salud mental que desafía todos los estereotipos y los métodos tradicionales de atención a la salud mental. Soluna Wellness es para la gente del sol y los disturbios de los Zoot Suit, y para los inmigrantes y sus hijos que celebran el Cuatro de Julio como nuestra propia tradición. Desafiamos el enfoque de la sociedad hacia la salud mental, cuestionamos cómo sanamos, desafiamos el machismo y el statu quo.
A veces nuestro enfoque es diferente porque creamos comunidad a través de la creatividad. Hemos encontrado sanación en las comunidades de low-rider, autos importados, tatuajes y grafitis. Hemos crecido aprendiendo sobre nuestras culturas y diversidad. Ya sea que estés empezando a pintar, seas un artista que regresa, un Diego Rivera o un Frida Kahlo, todos podemos crear comunidad a través del arte. Se trata de ser vulnerable y servir a los demás. Hemos descubierto que esto sucede de forma natural en nuestras clases, cada una con su propia cultura. Nuestra clase de escritura creativa es para narradores, y seleccionamos canciones cuidadosamente para ayudarnos a identificar quiénes somos y cómo nos relacionamos con ciertas emociones.
Soluna Wellness es un reto para mí, para nuestros clientes y para nuestra visión del proceso de sanación en su conjunto. Sin embargo, seguiremos aspirando a alcanzar metas más altas, incluso si no comprendemos completamente nuestras raíces. Los mexicoamericanos tienen una experiencia única, y juntos, como comunidad, podemos trabajar juntos para promover una mejor salud mental.
Este Mes de la Herencia Hispana, recuerdo la importancia de la cultura, la comunidad, la conexión y la creatividad: nuestros valores fundamentales en Soluna Wellness. Recuerdo cómo nuestras comunidades se han cuidado a sí mismas y a los demás, mucho antes de que los sistemas de opresión nos dieran planes de tratamiento estandarizados que vinculaban el valor de cada persona a cifras escritas y planes de comportamiento que cumplían o no. En Soluna Wellness, rompemos los moldes del cuidado para recordarnos que nuestra sanación está profundamente ligada a los demás, a nuestro ser integral y a quienes nos precedieron.
Si necesita apoyo para su salud mental y los centros de tratamiento tradicionales no le parecen adecuados, recuerde que puede explorar sus opciones. Descubra qué opciones hay disponibles y cómo podría ser el tratamiento para usted. Tenga en cuenta que, si bien la terapia y la medicación son útiles para muchos, existen alternativas y métodos complementarios de sanación que pueden apoyar su proceso de la manera que necesite.
Si usted es un proveedor en este campo, le pido que también sea curioso. Tómese el tiempo para aprender sobre las diversas formas de sanación que quizás no sean tan conocidas. Considere las necesidades únicas de las poblaciones a las que sirve. Sea creativo y sienta curiosidad por otras opciones que puedan apoyar la sanación. Considere si los clientes se sienten representados por el personal con el que trabajan o por el contenido que se comparte. Considere si se apoya su identidad integral o si tienen que dejar de lado diferentes aspectos para adaptarse a las expectativas de atención del profesional.
Recuerden, las posibilidades de sanación son infinitas. Solo tenemos que darnos el permiso de explorar esas opciones, y quienes somos proveedores debemos estar dispuestos a asumir riesgos para romper con el molde.
Para la comunidad hispanohablante, encuentre Recursos de MHA aquí.
Antonio Hernández es el CEO de Soluna Wellness.
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